Con un aire retro...

Con un aire retro y montones de toques "vintages" traemos hoy ésta habitación para mostraros lo que unas manos cómo las de Alma pueden llegar a hacer.
Los tonos de la habitación se eligieron marrón y turquesa y beige cómo color base.
La mayoría de piezas de ésta habitación son adquiridas en rastros y otras "rescatadas" de casa de sus padres y con un gran valor sentimental.
El tren de la pared es un vinilo y sirve para poner fotos.



Éste armario estaba en casa de sus padres y servía para ver la televisión. Su color original era madera rojiza y Alma lo tuneó en ese blanco decapado y forró con papel retro los cuarterones.Primero fué un "cambiador", ahora hace las veces de cómoda pero con puertas.
El globo terráqueo fué comprado hace muchos años para ella y ahora es su hijo quién lo utiliza. Quién no tuvo unos de éstos globos cuándo éramos pequeños?



La mesilla la compró casi regalada en un rastro, la pintó y tuneó al igual que el cambiador.



La lámpara es antigua, rescatada de casa de sus padres y con la base en mármol y una bola de cristal azul que le trae muchos recuerdos.



Láminas enmarcadas que representan escenas de la infancia y que evocan recuerdos de nuestros padres y abuelos.



Las fotos que hay colgadas en la pared se colgaron sobre un cable de acero y unas pinzas de fieltro fabricadas por ella misma, cortó unas plantillas de animalitos, las recortó y las pegó.



El armario ropero lo compró en un rastro por 60 euros , lo lijó y lo pintó en color vainilla, le puso baldas por dentro y tiradores nuevos cómo los que tenía su casa de la infancia.



El sillón blanco éstaba en el antiguo despacho de su padre forrado en "sky" marrón y lo llevó a tapizar en polipiel blanca.



Las cortinas son de "cristal", a rayas verdes en varias intensidades , también las tenía desde hace tiempo y quedaban perfectas aquí y dejan pasar mucha luz, que era lo que quería.



El papel de topos turquesa le encantó desde que lo vió y le costó mucho encontrarlo. Es de Eijjginger y lo compró por Internet.
El resultado no puede ser más ideal, evocando el estilo retro, con un montón de recuerdos que nos hacen volver a nuestra más tierna infancia.